Estaba cantado


La directiva de Alianza no aguantó más y decidió echar al técnico Richard Páez debido a los malos resultados, lo que ha llevado al equipo a estar en peligro de descender. La derrota en el clásico ante la U terminó por definir la suerte del venezolano.

El sábado por la noche, los integrantes de la comisión de fútbol se reunieron de urgencia y decidieron por unanimidad destituir a Páez.
Al entrenador se le había recomendado durante la semana no realizar cambios en relación al equipo que había vencido a Juan Aurich en Chiclayo, pero hizo caso omiso y mandó al campo a su hijo Ricardo David para dejar en el banco a Wally Sánchez en el clásico.

Pese a que la decisión ya estaba tomada, el venezolano dirigió ayer las prácticas, pero al término de las mismas recibió la llamada telefónica de Carlos Franco, quien le dio la mala noticia.
El técnico, entonces, decidió no dar la cara a la prensa, por lo que salió corriendo del estadio de Matute por la puerta de la avenida Abtao.
Por la tarde, Páez se reunió con Franco para arreglar detalles de su rescisión contractual. Se sabe que Alianza deberá abonarle al entrenador US$105 mil, pues su contrato vencía a fines de la próxima temporada.

El reemplazante. Por ahora no se sabe quién se quedará a cargo del equipo, pues César Chalaca Gonzales, quien llegó al club hace unas semanas para ser asistente del venezolano, anunció ayer que renunciará a su cargo.
Pero la preocupación mayor es quién será el técnico para la temporada 2009. No hay nada oficial al respecto, sin embargo, el primer nombre que se maneja es el del uruguayo Antonio Alzamendi, quien hace unos días fue echado del Sport Áncash.

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